mujeres y paz

Mujeres de Negro: 14 años de activismo por la paz

El grupo Mujeres de Negro se creó en Israel en 1988 contra la ocupación de los territorios palestinos. Su filosofía --contra la guerra y contra el nacionalismo-- se propagó tres años después a los Balcanes. En el 2001 el movimiento fue propuesto al premio Nobel de la Paz y recibió el Premio Milenio de la Paz para Mujeres de UNIFEM. Mujeres de Negro se ha convertido 14 años después de su creación en un símbolo de la paz y la noviolencia.

En el mundo, los grupos que comparten el nombre de Mujeres de Negro o que pertenecen a la Red de Mujeres de Negro contra la Guerra se han extendido por todo el globo. Actualmente existen más de un centenar de formaciones en Europa, Latinoamérica, Estados Unidos y Canadá, Asia y Australia.

Mujeres de Negro en Jerusalén Oeste
Marcha de Mujeres de Negro en 2001


La primera Intifada: el detonante para el primer grupo de Mujeres de Negro

El 9 de enero de 1988 ocho mujeres israelís salieron a la calle en Jerusalén Occidental para manifestarse, vestidas de negro y en silencio, contra la política de ocupación ejercida por su gobierno. Poco imaginaban entonces que su modesta iniciativa sería el germen de uno de los movimientos pacifistas más importantes, propuesto al Premio Nobel de la Paz 2001 y ganador del Premio Milenio de la Paz para Mujeres del Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM).

Todo empezó con la primera Intifada. Inspirándose en las Madres de la Plaza de Mayo argentinas, un grupo de mujeres pacifistas decidió transformar su rabia en una protesta silenciosa, vestidas de negro como símbolo del dolor. La cita: cada viernes, de una a dos del mediodía, en la plaza de París de Jerusalén. "El movimiento empezó a extenderse por todo el país", recuerda Ednna Gluckman, una de las pioneras del grupo de Tel Aviv. "Desde entonces no hemos dejado un solo viernes, llueva o haga calor, de estar ahí paradas".

Galit Altshuler creció en Jerusalén, aunque actualmente vive en Berlín. Entró en Mujeres de Negro durante la segunda Intifada: "Mi sociedad me da miedo, veo que peligroso es el radicalismo y el racismo con el que la gente habla". Y, efectivamente, la tensión puede medirse por las reacciones de los transeúntes durante sus concentraciones. "Los comentarios suelen tener tono sexista, como putas de Arafat, o nos tratan de traidoras, aunque hay gente que nos felicita", resume Lily Traubmann.

Su objetivo: Una paz justa para Oriente Medio

Mujeres de Negro ha defendido siempre una paz basada en cuatro principios: "El retorno a las fronteras de 1967, dos estados para dos pueblos, Jerusalén como capital a compartir y una solución justa para los refugiados", además de una presencia equitativa de las mujeres en las mesas de negociación. La idea de la reconciliación entre las dos comunidades es también clave para el grupo, que mantiene contactos con mujeres palestinas. Una de las fundadoras del grupo y líder del movimiento antinuclear israelí, la histórica Hagar Roublev, ya fallecida, trabajó de 1984 a 1987 en la oficina de París de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).

Montserrat Boix, fundadora de la red alternativa de mujeres en internet Mujeres en Red, guarda un vivo recuerdo de Hagar: "Ella consideraba que al ser israelí podía decir lo que los palestinos no podían. Estaba muy preocupada por los integrismos, también por el judío". Desde noviembre del 2000, el grupo forma parte de la Coalición de Mujeres por una Paz Justa, con la que ha organizado marchas solidarias para llevar ayuda humanitaria y alimento a Ramala y Jenin.

Mujeres de Negro de Belgrado
10 aniversario de la masacre de Srebrenica

Mujeres de Belgrado adoptan la idea de MdN contra el gobierno de Milosevic

A principios de los años 90, el movimiento recaló en varias ciudades de Italia, donde se crearon grupos de apoyo a las activistas israelís. Y a través de las feministas italianas, se creó el grupo de Mujeres de Negro de Belgrado.

El 9 de octubre de 1991, y luego cada miércoles durante 10 años, mujeres serbias se manifestaron, siguiendo el ejemplo israelí, en contra del régimen de Milosevic. Rechazando el papel de víctimas que se les adjudicaba por ser mujeres, lograron desmarcarse de la política nacionalista de su gobierno. "A veces éramos sólo cinco mujeres de pie en la calle --recuerda Jadranka Milicevic--, pero queríamos hablar por nosotras mismas y en nuestro nombre".

Jadranka nació en Sarajevo, pero al iniciarse la guerra en Bosnia tuvo que marcharse a Belgrado como refugiada. En diciembre de 1992 se incorporó a Mujeres de Negro y allí coordinó, hasta el fin del conflicto, el trabajo del grupo en los campos de refugiados. La recuperación de la dignidad fue una de las bases del proyecto, orientado sobre todo a las mujeres desplazadas. "Empezamos simplemente escuchando, nos sentábamos y tomábamos café --relata--. Les ayudábamos a ganar un poco de dinero, organizábamos talleres, trabajábamos con los musulmanes y en un hospital para niños con enfermedades crónicas".

Una densa red de solidaridad internacional e interétnica

Mientras duró la guerra en los Balcanes, Mujeres de Negro se empeñó en desafiar todas las fronteras físicas y étnicas. En 1995 organizaron una caravana de alimentos por la paz hasta Sarajevo. Durante el conflicto enviaron jóvenes desertores a Europa. Cuando muchos serbios callaban o apoyaban a Milosevic de diversas formas, reforzaron los lazos de solidaridad con mujeres croatas, bosnias y albanesas. Pero su gran logro fue, sin duda, la creación de la Red de Mujeres de Negro contra la Guerra, que reúne a grupos de mujeres pacifistas de todo el mundo y de toda la ex-Yugoslavia, y la celebración, a lo largo de 10 ediciones, del Encuentro Internacional de Solidaridad de Mujeres contra la Guerra en diferentes lugares de los Balcanes.

Para el director de cine serbio Zoran Solomun, autor junto a Helga Reidemeister del documental Mujeres de Negro, "éste es el mejor grupo de Serbia con diferencia". El cineasta conoce a las fundadoras del grupo desde su juventud y valora su trabajo: "Se han mantenido con la cabeza clara y están moralmente limpias, nunca han aceptado dinero de ningún gobierno".

El fin de la guerra de Kosovo y el cambio de gobierno no han acabado con su política de mujeres. Siguen trabajando por la objeción de conciencia y por la depuración de las responsabilidades en los crímenes de guerra, y organizan talleres ambulantes por Serbia, tejiendo una densa red de asociaciones de mujeres de todo tipo.


¡Participa tú también! ¡Contacta con los grupos de MdN en España y Latinoamérica!

En España: En Barcelona, el grupo Dones x Dones se reúne los jueves en el centro Ca La Dona (Casp, 38. Teléfono: 93.412.77.01). Las Mujeres de Negro de Madrid, se pueden visitar en la calle de San Cosme y San Damián 24, 2º- 2 y en la red. El Colectivo Mujeres de Negro de Sevilla se encuentra en la Casa de la Paz (Aniceto Saénz,1 local 3. Plaza del Pumarejo) y en Internet. Existen también grupos en Valencia y las Islas Baleares.

En América Latina: Mujeres de Negro se manifiestan en México (e-mail), Costa Rica (e-mail) y, especialmente, en Colombia, integradas por la Ruta Pacífica de las Mujeres y la Organización Femenina Popular (OFP).

© Susana Galán, WLOE. Junio 2002.

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