Vandana Shiva es una mujer múltiple. Física, filósofa, pacifista
y feminista, una de las pionera del movimiento ecofeminista, asesora
de la Red del
Tercer Mundo, directora y fundadora de la Fundación
para la Investigación en Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente,
en Nueva Delhi, premio Nobel alternativo y, ante todo, mujer e hindú.
Shiva es
además una de las voces más críticas contra la globalización, los
alimentos manipulados genéticamente, la biopiratería -el sistema de
propiedad intelectual de semillas- y las grandes multinacionales que
controlan la producción agraria en todo el mundo y, también, en la
India. Durante el segundo Encuentro Ciudadano Internacional, celebrado
el pasado mes de abril en Barcelona, la activista hindú pronunció
la conferencia "Las multinacionales y el terrorismo alimentario".
Este es un resumen de sus palabras.
¿Qué es el ecofeminismo? Definiciones de una ideología postmoderna
Vandana-
El ecofeminismo es diferente a otros movimientos en el sentido
de que, por ejemplo, mientras que se necesita tener a un brillante
Marx o a un brillante Lenin para crear el marxismo y el leninismo,
el ecofeminismo es tan antiguo como la vida misma. El ecofeminismo
es poner la vida en el centro de la organización social, política
y económica. Las mujeres ya lo hacen porque a ellas se les ha dejado
la tarea del cuidado, del mantenimiento de la vida. Pero todas las
sociedades lo han hecho también como su primer objetivo. Reunir dinero
es un objetivo más bien reciente de la humanidad, maximizar la riqueza
de la vida ha sido sin embargo el principal objetivo de todas las
sociedades a lo largo de la historia.
El ecofeminismo
es la convergencia de la ecología y el feminismo. La ecología dice
básicamente que no se pueden destruir los fundamentos ecológicos a
través de los que sobrevivimos. Y el feminismo dice que no hemos nacido
desiguales, que formamos parte de la misma especie. El ecofeminismo
es realmente la filosofía de toda sociedad duradera. Y su reciente
articulación ha venido de la mano de algunas de nosotras, que nos
hemos dado cuenta que las estructuras modernas que se han ido creando
son simples juegos con los que se divierten las personas que no tienen
nada mejor que hacer. Las personas que están ocupadas cuidando de
un niño, de una madre enferma, de los pobres de la localidad, no se
dedicarían a crear, por ejemplo, organismos desarrollados con ingeniería
genética para tolerar mejores dosis de herbicida. Porque estas personas
están protegiendo la vida y no les sirve decir: esta es mi propiedad,
porque poseen las cosas a través de una relación de amor y de ternura,
no a través de una relación de posesión.
La unión de acción y reflexión para preservar la diversidad frente
a la intolerancia
Vandana-
Creo que en gran parte el ecofeminismo fue una articulación de movimientos
existentes. Tanto Maria Mies como yo procedemos de los primeros escritos
y vivimos la vida como ecofeministas. Ambas hemos emergido de diferentes
movimientos. Por lo tanto yo no estoy de acuerdo con que son los políticos
los que crean los movimientos. Nosotras éramos pensadoras y escritoras
que vivíamos de un modo determinado y que a partir de ahí articulamos
aquello que vivimos en un movimiento. Por tanto es una filosofía donde
la acción y la reflexión están unidas en una relación indivisible.
No hay una línea recta, no hay una ideología perfecta, es simplemente
una política de responsabilidad, de amor, de compasión. Yo he intentado
durante los últimos cinco años extender la filosofía del ecofeminismo
hacia el movimiento que nosotras llamamos Mujeres
Diversas por la Diversidad. Allí hablamos de cómo tanto la India
como Pakistán están pasando por una misma fase, no hay materialmente
ninguna diferencia, sólo que en Pakistan se llama un boom musulmán
y en la India un boom hindú -yo lo llamo una monocultura de la mente-,
y ambos utilizan el mismo tipo de violencia para actuar contra la
diversidad. Pero, primero, la diversidad no es el problema, la diversidad
es la solución. Y mantener un espacio para la diversidad es la solución
democrática para las crisis de todo tipo. Para las crisis políticas
de la intolerancia, las crisis ecológicas de la no sostenibilidad
y las crisis económicas de la exclusión y de la injusticia.
Las ecofeministas
del norte frente a las del sur
Vandana-
Yo no creo que haya una diferencia entre el ecofeminismo en el
norte y en el sur en términos del trabajo de las mujeres. No hubiera
escrito un libro con Maria Mies si creyera que es imposible conseguir
algún tipo de encuentro con ella. Yo nunca doy recetas, pero no creo
que el hecho de que vivamos en diferentes contextos permita a nuestra
razón no vivir la vida según los principios fundamentales de la justicia
y la sostenibilidad. Cómo se expresen en nuestros diferentes contextos
será diferente, pero los principios no pueden ser diferentes. Los
principios se ocupan realmente del cuidado, de compartir, de charlar,
y esto también es válido aquí. No se puede tomar parte en la sociedad
a menos que se sigan la mayoría de estos principios. Puede que no
tengas un buen fin de semana, te morirás de aislamiento, de miseria
y de soledad a menos que tengas una red de charla. Por lo tanto en
ninguna sociedad nos podemos permitir el lujo de sacrificar las relaciones,
e intensificar las relaciones es de lo que trata el ecofeminismo.
El capitalismo
ha crecido haciendo más cómodo cada aspecto de nuestra vida, ha sido
presentado como un modo de crecimiento, pero es en realidad un modo
de pobreza. Porque lo que producimos por nosotros mismos como parte
de la vida diaria, el cariño de un niño, el de un anciano, un hogar,
un alimento, todo se pone en el mercado y lo tenemos que comprar.
Y nosotros tenemos que trabajar en aburridos trabajos en otros lugares
para comprar nuestras necesidades básicas de supervivencia, el cariño
de un niño, la comida en el supermercado, la gente mayor tiene que
trabajar, trabajar y trabajar toda la vida para tener una pensión.
Y de algún modo la globalización es el clímax final del capitalismo
que se va extendiendo, está en sus límites. Por lo tanto, en un sentido,
la pobreza del capital es que destruye las relaciones para hacer más
cómoda nuestra vida, y la riqueza de las relaciones es que nos permite
producir lo que necesitamos. Yo vengo de una región del norte de la
India y hay muchas cosas para las que no necesitamos dinero, sólo
amor mutuo. Por lo tanto, las relaciones son la alternativa al capital.
Crear relaciones es la alternativa a la pobreza que causa el capital.
La igualdad entre mujeres y hombres:
el respeto a ser diferente
Vandana-
La igualdad puede significar dos tipos de cosas, por un lado puede
significar el parecerse, ser similares, o puede significar, por otro
lado, diversidad sin discriminación. Yo creo en esta última definición
de igualdad. Yo quiero tener la posibilidad de ser hindú, no quiero
convertirme en una europea. Yo quiero ser y quiero espacio para ser
hindú. Yo quiero ser una mujer, no quiero convertirme en un hombre,
no quiero poder ser violento, como mi segunda naturaleza, no quiero
ser irresponsable, no quiero asumir que otra persona tenga que arreglar
el desorden que dejo tras de mi, yo tengo que arreglar el desorden
que creo.
Pienso que
durante mucho tiempo se ha asumido que la igualdad entre géneros significa
que las mujeres tienen que imitar lo que los hombres son hoy en día,
pero el macho dominador es ávido, violento y extremadamente irresponsable.
Yo no veo mi liberación en ninguna de estas categorías. La línea de
la semejanza no es el camino por el que tenemos que ir. Yo no me desarrollaré
como hindú convirtiéndome en europea. Está bien que haya hecho un
PHT en Física. Soy tan inteligente como lo puede ser cualquier físico
en Europa o América. Pero eso no impide que yo vista mi sari, a mi
me gusta mi sari, que es tan bonito, mira sus diseños, ¿porqué debería
ponerme unos tejanos si no me sientan nada bien? Estoy demasiado gorda
para ponérmelos. El sari se expande conmigo. Por lo tanto, yo quiero
la libertad para ser diferente, pero no quiero ser castigada por serlo.
Esto es para mi la igualdad.
Una ideología basada en la confianza
y contra la globalización
Vandana-
El ecofeminismo es ahora el desafío más básico contra las estructuras
dominantes de todos los tiempos, que son el capitalismo, racista en
el sentido de que domina el privilegio de las particularidades, y
definitivamente patriarcal, porque asumimos que toda la humanidad,
hombres y mujeres, ha de ser modelada según el hombre capitalista.
Y sé que
cuando articulo mi filosofía ecofeminista hay un profundo desacuerdo
en algunos sectores, no pueden aceptarlo, porque yo veo que el patriarcado
capitalista dominante es una ideología basada en el miedo y la inseguridad,
está basado en el miedo de todo aquello que está vivo y es libre en
sus propios términos, una abeja, una mariposa, un niño, una mujer,
un hombre. Y cualquier libertad autónoma es amenazante para ellos,
y por eso la tienen que aprisionar, manipular los genes de una planta,
matar a las mariposas y las abejas y llamarlas "usurpadoras de polen".
Una visión que ve a las abejas como un fastidio, a los granjeros como
un fastidio, a las mujeres como un fastidio, a las malas hierbas y
a la biodiversidad como un fastidio es una visión basada en el miedo.
Y el ecofeminismo dice: hay suficiente para todos, no tienes que asustarte,
no tienes que destruir la vida para conseguir un poco... Se necesita
confianza para permitir a la vida evolucionar en libertad y alimentarse
a sí misma en el proceso. El ecofeminismo es una filosofía de la seguridad,
de la paz, de la confianza, el patriarcado capitalista es asustadizo,
es estrecho de miras, está tan terriblemente asustado que no puede
tolerar a otras especies o culturas.
Las políticas del Banco Mundial
y las multinacionales en la India
Vandana-
Hay una política del Banco Mundial que evita al gobierno tener que
asegurar que la comida que se produce en el país alcance a la gente
a precios asequibles. El Banco Mundial forzó al gobierno a reducir
los subsidios que hacían que funcionara la distribución. No son subsidios,
son apoyos. Se tiene que gastar dinero para hacer algo así, estos
son derechos fundamentales de nuestra gente. El Banco Mundial dijo:
"No, no se puede gastar este dinero para alimentar a la gente". Así
empezó la crisis alimentaria, la gente dejó de comprar comida y empezó
a morir de hambre. 50 millones de personas están a punto de morir
de hambre y mientras tanto 60 millones de toneladas se pudren en los
graneros. Pero estos 60 millones de toneladas no son excedentes. Son
excedentes creados haciendo morir a la gente de hambre. Yo los llamo
"pseudoexcedentes". Y ahora estos "pseudoexcedentes" están siendo
exportados al mercado mundial anunciando que la India tiene tanto
alimento que lo puede aportar para la exportación. Pero nosotros tenemos
demasiado alimento porque la gente se está muriendo de hambre.
Los hindúes
ven los que está pasando y los granjeros hindúes protestan mucho.
Yo he marchado con granjeros en grupos de 100.000 o de 500.000 para
decir básicamente que se pare este sistema. El proceso es difícil,
en realidad se ha hecho difícil, no es difícil en si mismo, pero se
ha hecho difícil a través de la eliminación de los subsidios y el
apoyo. Los granjeros lo cambiarían pero las políticas que están siendo
conducidas por el Banco Mundial y la OMC y el gobierno de los Estados
Unidos básicamente no dan la oportunidad al gobierno de escuchar a
los granjeros y a la gente, se han convertido en esclavos de Monsanto
y Cargill en el proceso de la transición hacia lo que yo llamo la
"agricultura liberalizada muerta", un librecomercio de dumping, y
no un sistema en el que la biodiversidad sea libre, pertenezca a los
pequeños campesinos, donde el agua sea accesible para ellos y la comida
sea accesible para todos. Este sistema es muy sencillo de crear, pero
está siendo impedido por las políticas que nos gobiernan a nivel internacional,
y este es el motivo por el que yo cada día de mi vida digo que tenemos
que dejar de cooperar con estas políticas.
También
Gandhi caminó hasta la playa para buscar sal cuando los británicos
decían que ellos eran los únicos que podían hacer sal, para así tener
más dinero para financiar mayores ejércitos para dispararnos.
** Entre la vasta
producción bibliográfica de Vandana Shiva se encuentran los
libros "Monocultivos y Biotecnología" y "Abrazar la
vida. Mujer, ecología y desarrollo", entre otros. Es coautora
además, junto a la socióloga alemana Maria Mies, de Ecofeminismo
y "La praxis del ecofeminismo".
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© Susana Galán,
WLOE. Mayo 2002.
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